domingo, 7 de septiembre de 2008

Estrellas fugaces


Hay estrellas fugaces que pasan por nuestra vida, nos deslumbran con su brillo y nos quedamos boquiabiertos ante su definitiva ausencia... ese brillo efímero nos hace olvidar el esplendor de la luna o de las estrellas que hace tantos años que nos acompañan, no hay que olvidar que aunque hermosa una estrella fugaz no es más que un pequeño meteorito, vamos, un trocito de piedra... así que no hay que lamentarse por su pérdida.


En la vida conoceremos muchas estrellas fugaces, es importante no olvidarnos de los verdaderos soles y estrellas que iluminan nuestra vida, gracias por estar aquí y acunarme... Vuestra luz me ha ayudado en este descanso obligado para tomar aliento, besos vasquitos, abrazos en conciertos especiados en Granada, la serenidad en las aguas azul esmeralda de Formentera, cariños familiares al mirar el brillo del sol entre las hojas de los pinos de mi querida Mallorca. Espero no espaciar tanto mis entradas ahora que estoy de nuevo en el camino al equilibrio.

3 comentarios:

Ana dijo...

Qué alegría leerte de nuevo, tan coherente como siempre, valorando y analizando lo bueno de la vida.


Tienes razón, pasarán estrellas fugaces iluminando algunas noches, eclipsando a la luna y al lucero del alba.
Estrellas que cautivan la mirada con su resplandor pero que sólo están de paso cumpliendo su función: despertarnos del tedio, resucitar el alma dormida, deslumbrar nuestra ilusión.
Gracias a esos meteoritos descubrimos nuestra olvidada luz interior.
Ellos no lo saben, ni lo imaginan, pero su estela quedará en nuestro anónimo recuerdo.

Los verdaderos soles y estrellas que nos acompañan siempre, incondiconalmente, son el apoyo para compartir alegrías, superar obstáculos y mitigar las penas. Son esos astros que como ángeles de la guarda nos protegen y miman todos los días del año y todas las noches de nuestra vida.
A ellos les debemos las ganas de vivir, de luchar, de soñar y de sonreir. Familia, amigos, seres queridos que vamos encontrando en nuestro camino y que se quedan en el corazón eternamente.

Me encanta volver a leerte feliz, relajada y con renovadas fuertas. El verano te devolvió esa paz que mereces.

Miles de besos vaskitos, serenos y dichosos de tenerte como amiga.
Cuídate, porque tú lo vales ;)

Eres de esas pocas personas que no necesitan representar un personaje para ser atractivas, leales y sinceras. Ni te frenan las distancias, ni el medio, ni los tópicos ni las malas experiencias. Consigues ser tú misma y mantener a tus amigos en tu vida junto a ti.
Enhorabuena la más brillante de todos los Universos¡¡¡

Tqm.

Tanhäuser dijo...

He entrado varias veces, casi, casi de puntillas.
La verdad es que tengo a los amigos del blog muy descuidados por razones de tiempo, pero prometo hacer una excepción contigo, mi querida Astrónoma.
Me encanta verte activa de nuevo.
Besos

Astrónoma dijo...

Querida Ana: no sabes como te quiero preciosa, un abrazo muy grande.

Querido Tanhi: te tengo siempre en mi pensamiento :).