martes, 17 de febrero de 2009

La montaña rusa


Se me había olvidado como eran los vaivenes y las sacudidas... yo pretendía vivir en la calma y me ha tocado recordar cómo era la montaña rusa .... bajando a velocidad vertiginosa a los abismos, enfrentada a los fantasmas del pasado.


De nuevo sin aire para respirar, la angustia oprimiendo el pecho, mujer sumergida sin encontrar la salida... quería marcharme, lejos, de todo, lejos...


Olvidar la marejada y encontrar aguas mansas en las que poder salvarme...




La vuelta ha durado poco esta vez, pero ha sido intensa, para recordarme que no debo creerme segura, que hay que disfrutar cada minuto porque no sabemos que nos traerá el mañana.


Miedo a la muerte de los seres queridos, a la soledad, a la esclavitud del chantaje emocional, al exceso de responsabilidad, miedo, pavor, ¡miedo! ... bufff cuantos fantasmas, que vuelven y te noquean en el momento más inesperado y te dejan abatida y sin fuerzas.


Ahora todo vuelve a la calma, con el corazón aún agitado pero segura de lo que no quiero volver a pasar ni a sentir, ¡seré lo que yo quiera ser!

martes, 3 de febrero de 2009

La timidez


Me dices que me arriesgue y, lentamente, sin apenas darme cuenta, me vas desnudando, despojándome de corazas y escudos y yo, me quedo temblando, ante tu proximidad y tu fuerza, que me envuelve como un torbellino.



Dices que soy como una estrella, inalcanzable, aunque te hechizo con mi brillo. ¿Cómo hacerte entender que poco a poco te voy enseñando mi alma, abriendo la cerradura a mi maltrecho corazón?.



Hablo contigo, encandilada pese a que te temo, intentando emerger de este túnel sin luz abrazada a tu voz, ofreciéndote lo mejor de mi a pequeños bocados, suavemente, dulcemente, inexorablemente ...



Te pienso, te siento, lucho contra esta timidez que me dice que huya, contra este corazón que me grita que me quede, contra mi voluntad que tiene miedo a sufrir una vez más ...

Lucharé y venceré.

viernes, 30 de enero de 2009

Feliz cumple Martilla


Querida Marta:


Hoy, el día de tu cumple, quiero agradecerte que me enseñases de nuevo a vivir... andaba perdida y me diste el mapa de vuelta a mi misma, me abriste tu casa y tu corazón, sin conocerme... entré en tu vida y ya no quise salir.


Martita niña gato eres todo dulzura y corazón, me enseñaste a amar Valencia y a disfrutar de el carmen, los vicios italianos de la papardella, a volver a ronronear al comer un helado, a volver a sonreír cuando algo te hace feliz.


Andaba perdida y sumergida y me enseñaste a emerger de nuevo, a volver a ser niña, a disfrutar de las cosas sencillas... Por eso quiero desearte que seas muy muy feliz, Martita azul, estás en mi corazón y te pienso mucho, sabes que este mar que nos separa al fin y al cabo, de vez en cuando, también nos junta. Eres de las mejores amigas que pueda jamás tener, pese al silencio, pese a la ausencia... Te recuerdo sonriendo siempre, con cara de pilla, entre albahaca y yogur griego, bailando hasta el amanecer en la flaca, diciendo: queso, quesito, queremos queso :D.


Mi querida Martilla, te mereces todos los soles y estrellas de este mundo, que no pueden competir con el brillo de tu luz, gracias por estar en mi vida y por todo lo que me has dado, feliz vuelta alrededor del sol.


Brilla, princesa!